El Logroñés suma tres remates al palo en Castalia y sólo un punto, que sabe a poco y que obliga a los riojanos a ganar a rivales de la zona alta
La vida sigue igual, sufrimiento en blanco y rojo,pero fuera de los puestos de descenso. Un punto más, ya son 41, y una jornada menos, sólo quedan cinco. Para los del vaso medio vacío, que haberlos, haylos, el saldo ante dos rivales directísimo es de un exiguo punto de seis posibles. Poco bagaje que recompensa la escasa ambición demostrada por los de Sergio Rodríguez ante el Efesé y en la recta final del choque de este domingo en Castalia.
Los riojanos han desaprovechado esta jornada el favor del Fuenlabrada, que derrotó al Cartagena, y una oportunidad de oro de sumar 7 puntos de una tacada ante un rival más que directo por la permanencia. Una buena primera mitad ante los de Garrido no empaña que los riojanos se han complicado definitivamente la vida. Tocará remar y mucho para acercarse a los 49 puntazos de los que ya disfrutan Mirandés o Málaga.
Este domingo había que sumar de tres en tres y precisamente tres son las veces en las que los de Sergio Rodríguez se han topado con los palos de Óscar Whalley. En esta ocasión, la fortuna ha regateado a los riojanos en un partido en el que tras una buena primera mitad, el miedo a perder condicionó el desarrollo de una segunda parte con poco fútbol.
Ante las bajas, Sergio Rodríguez apostó de inicio por alterar lo menos posible el habitual dibujo de las últimas jornadas. Petcoff por Sierra y Pacheco por Olaetxea, hombre por hombre y declaración de intenciones en toda regla: los riojanos querían crecer con balón.
La primera mitad tuvo claro color blanquirrojo. A excepción de una clara ocasión desperdiciada por Rubén Díez tras grave error de Iago, el Logroñés fue claro dominador de los primeros 45 minutos. Los de Sergio Rodríguez adelantaron líneas, presionaron más cerca del área de Óscar y salvo un par de errores no forzados en la salida de balón, recuperaron suversión más peligrosa. Petcoff en un par de ocasiones, Bobadilla, Álex Pérez y Mesa protagonizaron las ocasiones más claras, con disparo al larguero del central madrileño incluido.
Tratando de olvidar cuanto antes la derrota ante el Cartagena, los de Sergio Rodríguez firmaron una primera parte plena de personalidad en Castalia, sin renunciar al balón y generando ocasiones de peligro. Los riojanos supieron circular el balón con la velocidad necesaria para hacer daño a un Castellón, muy cerrado, con muchas precauciones y que sólo se estiró para tratar de incomodar con su presión la salida de balón riojana.
Tras el paso por vestuarios, el ritmo se desplomó y en un mar de interrupciones y errores, Pacheconaufragó. Sin la brújula que debía guiar el juego blanquirrojo, el Castellón comenzó a generar peligro.Garrido olió la sangre y movió ficha, retiró a un desaparecido Señé y metió el campo a César Díaz buscando profundidad y velocidad por el costado derecho, allí por donde Iago López se afana semana tras semana en ocultar que la zurda sólo la usa para apoyar.
Con el partido roto y el choque descontrolado, Ortuño no acertó con su remate tras un buen servicio de Rubén Díaz. Más preciso fue Paulino, en la réplicaun minuto después, en el 64, con un disparo raso al palo derecho de Óscar que el poste repelió. Apenas siete minutos después, Álex Pérez estrelló su segundo balón de la tarde en el larguero castellonense. No era el día.
A falta de un cuarto de hora para el final, Garrido quemó sus naves y metió en el campo dos delanteros más: Soriano y Cubillas, no debió de escuchar a Sergio Rodríguez en la rueda de prensa previa al partido o quizás sí y quería sacudirse el sambenito, quién sabe. En el banquillo contrario, Pineda, atento al pinganillo, acababa de recuperar para la causa, cuatro jornadas después, a Bogusz.
Aún aguardó un poco más el Logroñés para gritar a los cuatro vientos que, visto lo visto, se conformaba con un punto. No vaya a ser que se cumpla aquella máxima del fútbol sobre el perdón. A falta de diezminutos para el final del encuentro, David González sustituyó a un desafortunado Mesa y a falta de unopara el final, Gorka y Vitoria, mes y medio después, saltaron al césped para disputar los últimos compases de un choque en el que el Logroñés, a los puntos, mereció más.
Cinco finales por delante, la primera ante el Girona el próximo domingo en Las Gaunas. Con el crédito dilapidado, los riojanos están obligado a seguir sumando si quiere continuar fuera de peligro.
C.D. Castellón: Óscar; Delgado (Muguruza Min. 82), Lapeña (Indias Min. 82), Gálvez, Víctor; Fernández, Bodiger, Rubén Díez, Mateu (Cubillas Min. 73), Señé (César Díaz Min. 62) y Ortuño(Soriano Min. 73).
U.D. Logroñés: Santamaría; Medina, Pérez, Bobadilla, Iago (Bogusz Min. 71), Iñaki; Paulino(Vitoria Min. 89), Andy Petcoff, Pacheco (Gorka Min. 88) y Nano Mesa (David González Min. 80).
Goles: Sin goles.
Árbitro: David Gálvez Rascón (Colegio Madrileño). Amonestó al local Fernández (Min. 39) y al visitanteBogusz (Min. 85).
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 37ªde la Liga SmartBank.