Un buen Hércules aplaza el sueño del ascenso, pero este curso la UD Logroñés ha dado un paso de gigante en su propósito de alcanzar la Liga 123
Por @scaneda
Aún resuenan en el Municipal de Las Gaunas los ecos de los más de diez minutos de cerrada ovación que miles de blanquirrojos han dedicado a los de Sergio Rodríguez una vez finalizado el partido frente al Hércules de Alicante. A pesar del 0-0 que lucía el marcador de Las Gaunas y de quedar apeados de la lucha por el ascenso a la Liga 123, los jugadores riojanos han recibido el reconocimiento orgulloso de su afición. La misma que, entregada a sus colores, ha llenado durante la previa del partido las calles de Logroño de camisetas blanquirrojas y de banderas de La Rioja y que, en las horas previas al choque contra el Hércules, ha acompañado al autocar de sus jugadores camino al estadio, ofreciendo unas imágenes inéditas de comunión entre el equipo y sus aficionados.
La UD Logroñés, en cierta manera, ha ganado esta eliminatoria. Ha vencido en esta suerte de ronda paralela que jugaba contra sí misma, contra la historia y contra el fútbol riojano, muchas veces cainita y casi siempre injusto. Los más de 10.700 aficionados que han convertido Las Gaunas en una caldera blanquirroja suponen 10.700 buenas noticias para el presente y para el futuro de este club y, por ende, del fútbol de esta Comunidad, huérfana de referentes en el fútbol profesional. En caliente, los aficionados blanquirrojos rumiaban la desazón de despertar de manera brusca del sueño del ascenso, pero el mar de camisetas blanquirrojas que enfilaban el regreso a casa tras homenajear a los suyos, genera esa media sonrisa de quien sabe que el triunfo, tras el traspiés de este sábado, está mucho más cerca de lo que nos parecía hace sólo unos meses.
En lo deportivo, el Hércules de Alicante ha superado el envite de Las Gaunas con solvencia y cierta suficiencia, propia de los equipos veteranos y sabedores de estar predestinados para empresas mayores. La realidad es que los de Planagumà no han sufrido demasiado, han tirado de oficio en los momentos complicados y suyas han sido las ocasiones más claras del partido, que el debutante en la portería riojana, Unai Etxebarria, ha resuelto a la perfección.
En cuanto a los locales, lo han intentado durante los 90 minutos, con más ímpetu y más claridad de ideas en la primera mitad, y con más corazón que fuerzas en la segunda. Como ocurrió en el Rico Pérez, a los de Sergio Rodríguez les duró la gasolina una mitad, la primera. En esos primeros 45 minutos, Marcos André, Ñoño o Rubén Martínez tuvieron ocasiones para batir a Falcón y subir varios grados la caldera de Las Gaunas, pero faltó el acierto. La grada creía y empujaba, pero el acierto en los metros finales no aparecía.
En la segunda, Ander Vitoria pudo adelantar a los locales tras una buena jugada por banda de Marcos André, pero el vasco no acertó a resolver en el área pequeña. Esa acción, en el minuto 66, junto a un disparo que salió rozando el palo de Andy, fue el mayor peligro que generó una UD Logroñés que nunca se rindió, nunca bajó los brazos y siempre lo siguió intentando, pese a que en muy pocos momentos transmitió la sensación de poder poner en verdaderos apuros a un conjunto alicantino muy sólido en defensa. En la recta final del encuentro, lo intentó Sergio Rodríguez con el regreso al verde de Rayco, la intensidad de Olaetxea y el desborde por banda derecha de Víctor López, pero no era el día.
La pizarra del míster blanquirrojo, que sorprendió de inicio con el cambio en la portería, se chocó de bruces con el rocoso 4-4-2 del Hércules. Los blanquirrojos lo intentaron sobre todo por banda izquierda, con Iñaki y Ñoño como principales argumentos ofensivos, pero los alicantinos supieron contrarrestar el juego de los locales acumulando muchos hombres en defensa, maniatando a los delanteros riojanos y ahogando los espacios para abortar el peligro entre líneas que buscaba Rubén Martínez y compañía. La UD Logroñés no supo encontrar este sábado el resquicio por el que derribar el muro herculano, ni con el balón en juego ni en jugadas de estrategia, pese a los incontables saques de esquina botados por los locales, con escaso peligro todo sea dicho.
Así fue el partido de la UD Logroñés y el Hércules foto a foto
En definitiva, el sueño del ascenso a la Liga 123 se tendrá que retrasar, al menos hasta el año que viene, lo que no debería demorarse más allá de este lunes es una nueva campaña de abonados con vistas al curso 2019-2020 que rentabilice la ola de ilusión blanquirroja instalada estas semanas en esta Comunidad y en su capital. Juntos, somos más fuertes y cuantos más seamos, más lejos llegaremos. Esta es la lección que deja esta eliminatoria al fútbol logroñés y riojano.
UD Logroñés:Unai Etxebarria; Iglesias (Víctor López Min. 77), Iñaki, Caneda, Bobadilla; Andy, Ñoño (Olaetxea Min. 65), Salvador, Marcos André, Ander Vitoria y Rubén Martínez (Rayco Min. 65).
Hércules CF: Falcón; Juanjo, Adrián, Íñiguez, Samuel; Paco Candela, Chechu (Juli Min. 80), Diego Benito, Benja, Carlos Martínez (Alvarado Min 75) y Alfaro (Roige Min 67).
Goles:Sin goles.
Árbitro:Víctor García Verdura (Colegio Catalán). Amonestó a los locales Rubén (Min. 60), Rayco (Min. 78) y César Caneda (Min. 90) y a los visitantes Diego (Min. 21), Carlos Martínez (Min. 52), Juanjo (Min. 54), Alvarado (Min. 78), Adrián (Min. 88) y Benja (Min. 90)
Incidencias:Partido correspondiente a la vuelta de las semifinales del ‘Play off’ de ascenso a La Liga 123. Más de 10.750 espectadores en Las Gaunas en la mejor entrada de la temporada, alrededor de 500 de ellos del Hércules.