Una UD Logroñés irreconocible cae con estrépito ante el Oviedo B (3-4) y ve como el Mirandés se escapa a 6 puntos
Por @scaneda
En la previa del duelo frente al filial carbayón, Sergio Rodríguez deslizaba que este partido podía interpretarse como una suerte de ensayo de lo que está por venir, a finales del mes de mayo, en un ‘Play off’ de ascenso que, salvo hecatombe prolongada, la UD Logroñés tiene más que encarrilado. Pues bien, el resultado no puede ser otro que ensayo fallido. Luces rojas en una UD Logroñés irreconocible que cae con estrépito en Las Gaunas, no lo hacía desde el 16 de septiembre precisamente ante otro filial asturiano, el del Sporting de Gijón.
Los blanquirrojos han dilapidado una ventaja de dos goles, han tenido las agallas suficientes para empatar a tres y les ha faltado ambición para sobreponerse al cuarto gol de los de Javi Rozada. Este domingo, frente al Vetusta, todos los récords hasta ahora logrados por la imbatible zaga riojana han saltado por los aires. En el área riojana han aparecido los trapecistas, los domadores e incluso algún equilibrista. Un circo de tres pistas. Todo lo que podía salir mal, salió, todo el que podía fallar, lo hizo, fieles a la cita con el despropósito blanquirrojo. Este domingo se han gastado todos los bonus de fallos posibles. Hay que hacer las cosas rematadamente mal en Segunda B para perder un partido, en casa, cuando has conseguido marcar tres tantos.
En una segunda parte para olvidar, mejor dicho para que los técnicos del primer equipo tomen buen nota, los blanquirrojos han tirado por la borda el buen trabajo realizado en la primera parte, que finalizó con el resultado de 2-1. Bobadilla, atento al segundo palo, marcó el primero tras un córner botado por Salvador desde el costado izquierdo del ataque blanquirrojo. Pocos minutos después, Rayco, de penalti por mano dentro del área, ponía en franquicia el resultado para los locales. Al filo del descanso, en la primera desconexión defensiva de la tarde, Ernesto se adelantaba en el remate a Salvador y daba vida al filial ovetense.
Tras el paso por vestuarios, Rozada movió ficha dando entrada a Sandoval, con el que Iglesias soñará una temporada larga. El Vetusta salió mucho más enchufado que los locales y cercó el área de Miguel. Alarcón avisó de que la cosa iba en serio con un disparo desviado que culminaba una gran jugada visitante. Minutos después, tras un gran centro de Lucas, Sandoval fusilaba a Miguel y establecía la igualada. Incapaces de reaccionar, los locales estuvieron demasiados minutos a merced del Oviedo B, sin que en el banquillo local se augurase una reacción ante el acoso azul. Tanto es así que Ernesto agrandó la ventaja visitante con un disparo desde la frontal, precedido de una protestada mano de un jugador ovetense. Con un 2-3 en el marcador en el minuto 62, Sergio Rodríguez se autoenmendó. Pedrito, su gran apuesta en el once inicial enfilaba el túnel de vestuarios tras una tarde gris, y saltaba al campo Olaetxea, mientras Ñoño seguía calentando en la banda del Municipal.
En una jugada aislada, Ander Vitoria, con un gol de 9, volvía a meter en el partido a los riojanos, al acertar en el segundo palo con un balón servido por Rayco desde el perfil derecho. Con el empate en el luminoso de Las Gaunas, Sergio Rodríguez dio entrada a Ñoño en sustitución de Rubén Martínez. Cuando apenas llevaba dos minutos en el césped, en el área local Bobadilla protagonizó un despeje fallido que Ernesto, muy listo, aprovechó para establecer en el marcador el, a la postre definitivo, 3-4 en el marcador. A partir de ese momento, minuto 73, los blanquirrojos evidenciaron una falta de intensidad y de ambición preocupante a partes iguales. La parroquia local tuvo que esperar más de 20 minutos para, en casa, ver un acercamiento con peligro de los suyos, un disparo desviado de Ñoño en el tiempo añadido.
Sin urgencias clasificatorias y sumido en un mar de récords positivos, los blanquirrojos han visto este domingo como un conjunto recién ascendido, cuyo jugador más veterano tiene 24 años, sin ninguna presión y que no ganaba lejos de casa desde el 8 de diciembre de 2018, le ha dado una verdadera lección de cómo competir. Esta es la lección que deja partidos como el de este domingo, más allá de entender que los partidos también se ganan (y se pierden) en el descanso.
UD Logroñés:Miguel; Juan Iglesias, Iñaki, Caneda, Bobadilla; Andy (Ousama Min. 75), Pedrito (Olaetxea Min. 62), Carles, Ander Vitoria, Rayco y Rubén Martínez (Ñoño Min. 71)
Real Oviedo B: Lucas Díaz; Lucas Ahijado, Lobato, José Martínez, Ugarte; Javi Mier, Ernesto (Javi Cueto Min. 79), Edu Cortina, Steven (Jorge Mier Min. 70), Borja (Sandoval Min. 46) y Roberto Alarcón.
Goles:1-0 Bobadilla (Min. 22), 2-0 Rayco (Min. 36), 2-1 Ernesto (Min. 41), 2-2 Sandoval (Min. 50), 2-3 Ernesto (Min. 63), 3-3 Ander Vitoria (Min. 68), 3-4 Ernesto (Min.73)
Árbitro:Gorka Mazo Marauri (Colegio Castellano-leonés). Amonestó a los locales Martínez (Min. 54) y Ousama (Min. 86).
Incidencias:Partido correspondiente a la trigésima segunda jornada de Liga en el Grupo II de Segunda B.
