La UD Logroñés recibe al Osasuna B en Las Gaunas con la obligación de ganar para olvidar las tres derrotas consecutivas en Liga
Por @scaneda
Este domingo, a las 18.00 horas, en las Gaunas y frente al Osasuna B, la UD Logroñés tiene una cita con la victoria, la mejor medicina para olvidar la mala racha de resultados que aqueja a los riojanos. Urge pasar página cuanto antes porque las tres derrotas ligueras, más la traumática eliminación copera en Formentera, están poniendo en entredicho el buen inicio de Liga de los de Sergio Rodríguez.
Aunque los navarros no darán facilidades, la UD Logroñés tiene la obligación de ganar sí o sí un duelo marcado en rojo en el calendario, ya que dictará el futuro a corto plazo del bloque riojano. El domingo arranca un ciclo de partidos clave para reengancharse a la parte alta del grupo, con 3 de los próximos 4 choques en Las Gaunas (Osasuna B, Leioa y Real Sociedad B).
El técnico local cuenta con las bajas por sanción de los riojanos Miguel Martínez (2 partidos por “desconsideración o menosprecio” al asistente de Iglesias Villanueva) y César Remón (1 partido por la tarjeta roja frente al Lealtad). El resto de la plantilla está a disposición de Sergio Rodríguez, toda vez que Miguel Santos y Germán Sáenz han entrenado con normalidad una vez superadas sus molestias físicas. Así las cosas, Fermín Sobrón estará bajo palos y habrá que esperar para conocer si Sergio Rodríguez, tras la derrota frente al Lealtad, devuelve la titularidad a jugadores llamados a ser importantes este curso, caso de Borja Gómez, Ñoño, Muneta o Iván Aguilar. En principio, Cifu, Germán y Sotillos pelearán por dos puestos vacantes para completar la convocatoria de 18, en la que estará el portero del filial, Ricardo Osés.
En la previa del choque ante los navarros, Sergio Rodríguez apuntaba que el Osasuna B “está mejorando. Tenía jugadores que no habían competido en la categoría y, poco a poco, se van adaptando. Son jugadores fuertes, intensos en la disputa y no exentos de calidad.”. Del mismo modo, el técnico logroñés señalaba, en declaraciones facilitadas por el club riojano, que “palpo en cada entrenamiento que la gente está con muchas ganas de que llegue el partido y de revertir la situación. Nos hace falta la victoria por lo clasificatorio, lo anímico y por la confianza que siempre te da ganar”.
Por su parte, el Osasuna B llega a Logroño tras empatar el pasado domingo frente al siempre complicado Tudelano en casa (1-1), lo que le sitúa en la decimosexta posición del Grupo II. Lejos de Tajonar, el rendimiento de los de Sergio Amatriain baja bastantes enteros. En lo que va de Liga, los rojillos sólo han conseguido arañar un punto en Les Caleyes (2-2), tras perder en Lasesarre (3-0) y en El Plantío (1-0).
El Promesas está plagado de jóvenes futbolistas en pleno proceso de formación con la vista puesta en el primer equipo. El mejor ejemplo es del centrocampista Antonio Otegui, que jugó unos minutos el domingo frente al Tudelano y que a sus 19 años suma 11 partidos en Segunda y 3 en Primera. Otro de los valores de la cantera rojilla es el pichichi del Promesas, Kike Barja, autor de 4 goles este curso. La semana pasada Barja entró en la convocatoria de Diego Martínez para enfrentarse al Sporting de Gijón en El Sadar y esta jornada viaja con el primer equipo a Cádiz.
En el conjunto navarro también destaca el lateral Albisu, el más veterano del equipo con 28 años; así como el centrocampista madrileño Luis Perea, que también sabe lo que es defender la camiseta rojilla en Primera División. En la parcela ofensiva, regresará a Las Gaunas, Jordan Gaspar, tras su paso por el Castilla y el Sabadell. El ex blanquirrojo, autor del gol frente al Tudelano, se ha acercado a casa tratando de hacerse un hueco en el fútbol profesional desde el trampolín de Tajonar.
Este domingo, la UD Logroñés tiene ante su público una oportunidad inmejorable para ganar y sumar tres puntos fundamentales para olvidar, de una vez por todas, la pesadilla de Formentera y revertir la mala dinámica en Liga. Es cierto que los ascensos no se logran en octubre, pero no es menos cierto que los malos inicios lastran, no hace falta irse muy lejos para encontrar el mejor ejemplo.
